Entre el 24 y el 26 de octubre de 2025, París se transformará en un laboratorio de creación contemporánea con la cuarta edición de Art Basel en el Grand Palais. La feria, que se ha consolidado como una de las citas imprescindibles en el calendario internacional, llega este año con una apuesta que une arte, moda y diseño, de la mano de aliados excepcionales: el periodista y cineasta francés Loïc Prigent, el editor británico Edward Enninful y la firma Miu Miu, partner oficial del programa público.
Prigent volverá a dirigir artísticamente la sección Oh La La!, concebida para reordenar los stands tras los primeros días de feria y permitir instalaciones más libres, disruptivas e inesperadas. Desde Arte.news creemos que este gesto aporta frescura a un formato tradicionalmente rígido y ofrece al visitante una experiencia en perpetua mutación.
Por su parte, Enninful comisariará una jornada del programa de conversaciones, reuniendo a voces tan diversas como el fotógrafo y cineasta Tyler Mitchell, la arquitecta Frida Escobedo, el artista multidisciplinar Kiddy Smile y el historiador del arte Chris Dercon. Un cruce entre disciplinas que encarna la vocación de la feria: capturar el arte en tiempo real, como subrayó su director Clément Delépine, que en esta edición se despide para asumir la dirección de Lafayette Anticipations.
El recorrido se articula en dos grandes áreas: Emergence, con 16 galerías que participan por primera vez y que funcionan como una ventana hacia el futuro; y Premise, un espacio donde obras anteriores a 1900 dialogan con el presente, cuestionando la linealidad de la historia y la frontera entre épocas.
La moda tendrá también un protagonismo singular. Miu Miu, socio oficial por segundo año consecutivo, presentará un proyecto en el Palais d’Iéna a cargo de la artista británica Helen Marten, ganadora del Premio Turner en 2016. Su propuesta mezcla lujo, narrativa y arte contemporáneo, en línea con la innovadora experiencia que en 2024 llevó la firma a colaborar con Goshka Macuga.
Para Arte.news, esta edición de Art Basel no es simplemente una feria comercial, sino un retrato vivo de un París que sigue siendo capital cultural. En el encuentro entre pasado y futuro, lujo y disrupción, la ciudad se confirma como epicentro de un diálogo global donde el arte se expande más allá de los límites de las disciplinas.