Hoy, 3 de diciembre de 2025, el museo más visitado del mundo no solo abre un nuevo espacio; abre una nueva era en su concepción de la humanidad. El Museo del Louvre y el Museo del Quai Branly – Jacques Chirac inauguran conjuntamente la Galerie des cinq continents (Galería de los cinco continentes), un ambicioso proyecto que viene a sustituir y evolucionar el histórico Pavillon des Sessions. Si hace veinticinco años aquel pabellón fue un manifiesto político para la entrada de las culturas extra-occidentales en el «templo» del arte francés, esta nueva galería propone algo mucho más radical: pasar de la simple cohabitación al diálogo fluido. Ya no se trata de «invitar» a las artes de África, Oceanía, Asia o las Américas a un rincón del Louvre, sino de entrelazarlas en igualdad de condiciones con la antigüedad clásica y europea.
En Arte.news creemos que este movimiento es fundamental para descolonizar la mirada del visitante contemporáneo. La museografía, diseñada originalmente por Jean-Michel Wilmotte y ahora reinterpretada, permite una claridad expositiva donde las jerarquías geográficas se disuelven. En este espacio renovado de la Aile Denon, cerca de la recién acondicionada Porte des Lions, 130 obras maestras —42 del Louvre y 77 del Quai Branly, junto a préstamos de instituciones como el Museo Guimet— conversan entre sí bajo temáticas universales. No se agrupan por cronologías estancas, sino por las grandes preguntas que nos definen como especie: la representación del poder, las formas de lo sagrado y nuestra relación con la naturaleza.
El resultado de este comisariado compartido es fascinante y desafiante. El visitante podrá encontrar, por ejemplo, un sarcófago egipcio de la época ptolémaica dialogando con una monumental cabeza de moái de Rapa Nui. Aunque separados por miles de kilómetros y siglos de distancia, ambos objetos responden a la misma pulsión humana: la protección de la memoria, el linaje y la trascendencia. Para Arte.news, este gesto es clave: al yuxtaponer la antigüedad griega o romana con la escultura de Oceanía, se revelan los «dénominadores comunes» de los que habla Laurence des Cars, presidenta del Louvre, permitiéndonos intuir una humanidad compartida que trasciende fronteras.
Esta apertura no se limita a la exhibición estática. La galería nace con una vocación de escenario vivo, integrando disciplinas como la danza contemporánea. La coreógrafa Nacera Belaza inaugurará el espacio con su obra Les Ombres, una performance que busca captar la «energía y el aura» de los objetos expuestos, recordándonos que estas piezas no son meros artefactos etnográficos, sino creaciones vivas cargadas de significado. Además, la experiencia se extiende a la renovada hospitalidad del museo, con la apertura del Café des Lions y nuevos accesos que conectan el arte con el jardín del Carrousel, buscando una experiencia parisina más amable y accesible.
En definitiva, la Galerie des cinq continents es mucho más que una reforma arquitectónica financiada por la Fundación Marc Ladreit de Lacharrière; es una declaración de intenciones. En un mundo fragmentado, el Louvre apuesta por tejer correspondencias sensibles. Como bien señala Emmanuel Kasarhérou, presidente del Quai Branly, se trata de estimular un diálogo para una sociedad más armoniosa. Al visitar esta galería a partir de diciembre, no solo veremos obras de arte; nos veremos a nosotros mismos reflejados en el espejo de «el otro», descubriendo que, en el fondo, las preguntas siempre han sido las mismas.