La Fundació Gala-Salvador Dalí se complace en informar que mañana 30 de septiembre se inaugura una exposición temporal en el Palazzo Blu de Pisa, dedicada a la influencia del clasicismo italiano en la obra de Dalí. La muestra está comisariada por Montse Aguer, directora de los Museos Dalí, de la Fundació Gala-Salvador Dalí, y Thomas Clement Salomon, coordinador científico de Mondo Mostre, entidad organizadora. Abrirá sus puertas el 1 de octubre y podrá verse hasta el 5 de febrero de 2017.
Contenido de la exposición Dalí. Il sogno del Classico
La muestra hace especial hincapié en la importancia de Italia (que Dalí y Gala visitan en frecuentes ocasiones) y del Renacimiento en la obra de Salvador Dalí. Incluye 149 obras que abarcan desde 1945 hasta 1982: 145 procedentes de la Fundación Dalí, 3 de The Salvador Dalí Museum de San Petersburgo (Florida) y 1 de los Museos Vaticanos. Son 22 pinturas, 100 estampas de la serie La Divina Comedia y 27 ilustraciones para La Autobiografía de Benvenuto Cellini.
El núcleo central parte de una selección de óleos muy poco conocidos, cuatro de ellos son inéditos: S/T. Según “Muchacho en cuclillas” de Miguel Ángel, S/T. Moisés según “El sepulcro de Julio II” de Miguel Ángel, S/T. Cristo según “La Piedad Palestrina” de Miguel Ángel, S/T. Juliano de Médici según “El sepulcro de Juliano de Médici” de Miguel Ángel. Figuran en sus últimas creaciones de la década de los años 80, en que el artista reinterpreta en clave daliniana las obras maestras de Miguel Ángel. Presentadas como conjunto estilístico y temático por primera vez, estas obras nos permiten indagar en la técnica y el conocimiento del Dalí de este momento, y reflejar cómo sus inquietudes continúan traduciéndose en expresión artística. Ello nos adentra en la última etapa del pintor, hasta hoy bastante desconocida, pero que manifiesta un ideario daliniano muy particular, mediante una expresividad que persigue la persistencia del proceso creativo y la búsqueda de la inmortalidad. A través de la relaboración de las obras de Miguel Ángel, Dalí por un lado trabaja desde el respeto absoluto por la tradición y el pasado, por otro lado, advierte la necesidad de superarlos a través de una innovación constante siempre dirigida hacia la contemporaneidad.
Desde su expulsión del grupo surrealista, al inicio de la década de los 40, el pintor catalán abandera una nueva postura clasicista y de defensa del Renacimiento. Los intereses intelectuales de Dalí continúan expandiéndose a la manera de un humanista renacentista. Dalí se considera el precursor de una nueva fase renacentista. Es en este contexto en el que se realizan las ilustraciones para la autobiografía de Benvenuto Cellini, uno de los artistas más influyentes del Renacimiento florentino que le fascina por ser un hombre rebelde y controvertido, y las ilustraciones para La Divina Comedia de Dante Alighieri.
En la exposición se podrán ver también unos óleos de The Salvador Dalí Museum de San Petersburgo y una pintura de los Museos Vaticanos. Son obras realizadas por Dalí en los años 50 y 60 como ejemplos de la nueva etapa mística del artista en que las temáticas religiosas se funden con la inspiración de los grandes maestros del pasado.